Los procesos de familia, en la mayor parte de los casos tienen un componente emocional y relacional que requiere de una atención personalizada y profesional.

Los conflictos familiares no siempre encuentran respuesta en los Tribunales, de hecho, en numerosas ocasiones, los operadores jurídicos perciben la incapacidad judicial para dar una respuesta ajustada a las necesidades familiares.

Por ello, desde el despacho se prima el enfoque colaborativo, se trabaja desde el consenso y/o negociación, sin obviar las posibilidades que ofrece el proceso de mediación.

Llevamos:

  • Separaciones y divorcios
  • Nulidades civiles y eclesiásticas
  • Controversias en el ejercicio de la patria potestad
  • Liquidación Sociedad Gananciales
  • Filiación y Paternidad
  • Relaciones Paternofiliales
  • Incapacitación. Tutela, Curatela.
  • Adopción
  • Incumplimiento Obligaciones Familiares.